Con la llegada del otoño, llega el tiempo en que el sol y yo nos vemos las caras al ponernos en marcha.
Llega el otoño y los naranjas y marrones se apoderan de las calles. Las hojas se desprenden de los árboles y crean sus montañas particulares.
Llega el otoño con calabazas, boniatos y castañas. El sol arde en su color apropiado para no desentonar con el paisaje.
Llega el otoño y la ilusión de un amanecer se derrite con el frío, el pesar del atardecer nos conciencia de lo perdido.
Llega el otoño y las impresionantes fotos que se pueden hacer son el anhelo de la vida, ese sol anaranjado que despierta la alegría.
Llega el otoño y bellísimas postales se pintan cada día, imágenes que darán paso a la era más sombría.